Tuesday, September 28, 2010

En soledad

Casi una semana lejos y las ideas comienzan a ordenarse en algún lugar dentro de mí. Es como si una pieza de la maquinaria se hubiera salido de su lugar mientras la movían a un nuevo sitio, volviendo a colocarse en el sitio correcto hasta que todo dejó de moverse a su alrededor o -mejor dicho- hasta que la máquina a la cual pertenece estuvo ubicada en un solo lugar…

Tomando como punto de partida un aeropuerto casi desierto (por el día y la hora) y como punto final este día soleado, el cual -estoy segura- pertenece al verano pero quiso ser travieso y colarse entre las divertidas hojas de colores otoñales que llegan propiamente con esta estación, podría decirse que un millón de imágenes son ahora sólo recuerdos, recientes ¡sí!, pero al fin y al cabo recuerdos.

Podría encontrar las palabras para describir los acontecimientos de estos días, podría describir paso a paso la espera del viaje, los nervios de la llegada a un nuevo hogar y lo increíblemente extraño que resulta adaptarse a otro país, aún cuando se vivió antes en éste. Podría, pero no lo haré. Esos días y los sentimientos que desataron en mí, se quedan conmigo. Baste decir que aunque definitivamente me siento feliz, hubo una serie de sucesos inesperados que estuvieron a punto de hacerme renunciar. Pero no lo lograron. 

No soy más de esas personas que renuncian y dejan que sus sueños se vayan con el inicio de un nuevo día, no me rindo, no me doy por vencida. Quizá por eso sigo aquí cuando casi todo (todos) lo que quiero está allá. Estoy aquí viviendo lo que alguna vez representó una aventura que esta ocasión y cada día -en medio de un idioma que no es el de nacimiento- se torna más seria. Una aventura que en soledad se disfruta de una manera diferente, pero que no por eso debe dejar de compartirse.

Es así como entiendo que con la edad, aunque en realidad es más con la experiencia que dan ciertos eventos, nos vamos tomando la vida más en serio, tanto que en ocasiones nos olvidamos de vivirla para darle paso al estrés o al sufrimiento de no saber qué es lo que viene. Hoy, después de una “deliciosa” clase de yoga, disfrutando de un "matchachillo" (licuado de yoghurt con té verde en polvo) y un saxofón  -que da vida a una encantadora pieza de jazz-, he decidido comenzar de nuevo, dejar de preocuparme tanto.

Los planes siguen surgiendo y los sueños encontrarán su camino para volverse una realidad, seguramente los llevaré de la mano guiándolos hacia donde sea mejor dirigirse. Y mientras eso sucede,  seguiré extrañando (y mucho), pero viviendo, respirando y mirando tantas cosas, que hacen que sea imposible dejar de vibrar y sentir que todo esto vale la pena…


4 comments:

  1. Viajar es como leer un libro, ¿no? Eso me dijo Eduardo Lores, alguien que había viajado mucho, y que de hecho acaba de publicar un libro en Perú... Bueno: tú estás leyendo este libro y cuando lo dejaste, fue porque en cierta forma acabó, y ahora lo estás releyendo, ¿no? Porque has vuelto a él. Y sabemos que releer es más importante que leer, ¿no? Y eso lo dijo Borges. Y pues no vas a dejar, claro, el libro cuando entra el conflicto, cuando se arma la trama, claro que no... Tú eres fuerte y vas a continuar hasta el punto que tú quieras decir: ya: ahora sí: una decisión limpia. En todo eso: me asomaré, como quien te ve detrás de un hombro, el que sea, y te acompañaré... Saludos y que esa soledad, así sola, tan sola, se convierta en ¡La fiesta de la soledad!

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  2. Cómo disfruto y percibo tus sentimientos a través de lo que escribes (¿por qué será?)... Soy feliz porque TÚ estás feliz y muy orgullosa de que nunca te das por vencida... También te extrañamos, pero tu esencia sigue con nosotros.......Besos

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  3. Es verdad Fredy, tendré que empezar a pensar en esa fiesta de la soledad...
    Ma: los percibes porque seguramente los sientes por mí aún a través de la distancia... Y ustedes están conmigo, los llevo atados a mi muñeca...

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  4. Karla animo porq aunque estemos lejos sabes que seguimos contigo .... disfruta al máximo y no te rindas nosotros te hechamos porras

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